Hace más de 20 años que convivo con la música con la tranquilidad de quien sabe hacia dónde va, pero sin prisa por llegar. No necesito estar en todos lados, pero cuando estoy, trato de dejar marca. Mi historia es la de alguien que eligió la música por amor puro. Compongo cuando me inspiro, canto cuando siento, produzco cuando puedo ayudar a otros a brillar. No busco ser el más famoso, busco hacer las cosas bien.

En cada canción que escribo hay esperanza. En cada nota que canto hay honestidad. En cada programa que produzco hay respeto por el arte y por quienes lo hacen. Entiendo que la música no es solo entretenimiento, es compañía. Mis letras positivas y reflexivas acompañan momentos importantes de las personas. Mis programas abren espacios para que otros artistas cuenten sus historias. Mi trabajo detrás de escena ayuda a que grandes talentos encuentren su voz.

Después de dos décadas, sigo teniendo el mismo aire fresco del primer día. Porque cuando haces lo que te apasiona, con la gente que querés, el camino nunca se termina.